Si queréis sorprender a los vuestros con unas galletas que darán pie a juego y conversación, no os perdáis el post de hoy porque, sin molde específico alguno, haremos unas galletas que harán dudar a más de uno.
Este es el simpático resultado de la idea que os propongo.
Y estos los ingredientes para las galletas:
¿Os animáis? Pues vamos a ello.
Una vez tenemos la masa lista (no voy a especificar el proceso porque ya vimos aquí las cantidades y cómo hacerlo), éstos son los materiales que necesitarás:
Dos corta pastas, uno más grande que otro (los puedes sustituir por dos vasos de distinto diámetro).
1 pajita (de las que se emplean para beber los refrescos).
Ya está, con estos utensilios poco ortodoxos haremos nuestros botones :-D
Comenzamos cortando los círculos de nuestras galletas con el corta pastas grande.
A continuación, con el pequeño, volvemos a marcar las galletas sin terminar de cortarlas, sólo para marcarles la forma, como se ve en la imagen.
Con la pajita, ahora vamos perforando agujeros para simular los de los botones.
Los podemos hacer de 4 agujeros o de dos.
Cuando los tengamos listos y sobre papel antiadherente, los horneamos unos 10 minutos a 180ºC con calor arriba y abajo y si es posible con ventilador (los tiempos pueden variar de un horno a otro pero, en general, no os alejéis mucho de el porque se hacen pronto).
¡Y aquí están ya!
¿Cuáles son de verdad? :-D La verdad es que es una tarea muy divertida para hacer en familia y terminar merendando. A los peques les encanta meterse en faena y ya os digo que estas galletas las hacen bien porque no son nada complicadas, unas sencillas instrucciones y disfrutarán haciéndolas... ¡y comiéndolas! ;-)
Que paséis buen día.
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