Ya hemos ido viendo a lo largo de distintas entradas del blog que
no es lo mismo que el niño/a se sitúe junto a mamá, junto a papá, que no dibuje
a los hermanos o que los dibuje muy pequeños.
Cada cosa tiene un significado,
aunque, como siempre digo, no se pueden sacar conclusiones de un solo dibujo.
Aquí es verdad que saco conclusiones
con poca base porque no hay una gran remesa de dibujos sobre la que comparar,
pero estoy tratando de extraer los detalles más importantes de manera que os
sea más fácil interpretar los dibujos de vuestros hijos/as o allegados/as.
Hoy quiero hablar de la posición del niño respecto al dibujo de su familia con una comparativa entre tres dibujos de niños diferentes. Dos pertenecen a niños y otro a una niña, todos ellos del rango de edad de los cuatro años, aunque claramente hay diferencias madurativas entre ellos, cosa que se aprecia en el nivel evolutivo de sus dibujos.
Este primero que os muestro es
realmente curioso. Se trata de un dibujo realizado por un niño, gemelo de otro,
en el que dibuja a su madre (el todo medio circular que ocupa la mayor parte
del dibujo con proyección radial) y a su hermano gemelo dentro de ella. Él, por
su parte, se dibuja fuera de la madre y en un rinconcito del dibujo, casi sin
espacio.
Obviamente, la madre es muy
importante para ellos ocupa toda su vida, tanto que, para hacerla más grande,
la dibuja como un contenedor en el que introduce a su hermano, de un tamaño
mayor que el mismo a pesar de ser de la misma edad. Quizá los celos, le llevan
a considerar que el hermano está más cerca de la madre que él mismo, aunque,
por otra parte, lo tiene muy en cuenta porque lo ha dibujado y lo ha hecho más
grande que él, lo que implica otorga importancia y admiración.
Un dibujo quizá ideal del equilibrio familiar y de la estabilidad emocional es el que realiza esta niña que se sitúa junto a su padre y su madre, cogidos a ellos por las manos, cosa importante porque supone un vínculo que hasta ahora no hemos visto.
Hasta ahora, las figuras que
hemos visto están dispuestas espacialmente sin vinculación aparente entre
ellas. Aquí ya no, aquí ya hay una unión real, las manos aparecen juntas.
De todos modos, si afinamos un
poco, podemos ver que la madre ocupa la posición central del dibujo (que no nos
despiste el árbol) y el mayor tamaño, que ya sabemos que indica una mayor
importancia respecto a la niña.
Aquí lo dejamos por hoy, otro
día más; por cierto ¿cómo van esos dibujos, habéis descubierto curiosidades?
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