Hace ya meses, al hilo de la entrada Divertido cojín para habitación infantil, que podéis recordar aquí, os dije que más adelante os explicaría cómo hacer un cojín, bien, pues ha llegado el día ;-)
Es tan fácil que veréis que es una manera sencilla de iniciarse con la costura y obtener resultados satisfactorios. De hecho, yo he hecho todos los cojines de mi casa.
Pero veamos qué materiales necesitamos:
El tejido que queramos emplear para hacer el cojín.
El relleno del cojín.
Tijeras, aguja e hilo (aunque yo he empleado máquina de coser).
COMENZAMOS:
Lo primero es tomar las medidas de nuestro cojín, para cortar la tela acorde a sus dimensiones. En mi caso, y para que os sirva de referencia, el relleno del cojín mide 50x50cm (por si a alguien le interesa, son de IKEA) y, como me gusta que queden holgados, como se ve en la imagen del principio del post, les he dejado un margen de 60x55cm, pero si queréis que quede un cojín más compacto o apretado, ajustad más la tela, por ejemplo 55x50cm, siempre teniendo en cuenta que tenéis que dejarle unos centímetros de margen para las costuras. El motivo de que le dé unos centímetros menos de margen a un lado que al otro es porque yo he empleado una tela continua, para tener sólo que coser los laterales, con lo cual no pierdo en márgenes más que en unos laterales, para los que doy 2'5 cm por lado que suman los 5 cm totales que hay de diferencia de un lado con el otro.
En el caso del cojín que os traigo hoy, no vamos a poner cierre de ningún tipo, sino que dejándole cierto margen a la tela vamos a conseguir que quede cerrado y que no se abra. Ya vimos algo parecido en el post de los Saquitos de olor para los armarios, podéis recordarlo aquí. Teniendo en cuenta esto, las medidas totales de mi tela han sido 60 x 55+55+20cm, es decir, que he cortado un rectángulo de tela de 60 x 130 cm, como se ve aquí:
Bien, ahora vamos a doblar el rectángulo para darle la forma de nuestro cojín. Recordáis los 20cm que os he comentado que íbamos a dejar de margen para no tener que poner cierres al cojín, bien, pues doblamos el rectángulo de tela 20 cm (los que dejamos de margen para hacer precisamente el cierre) enfrentando los derechos de la tela y hacemos un pequeño dobladillo hacia fuera, es decir, doblando hacia el revés de la tela, como os señalo con el dedo en la imagen. Y cosemos ese dobladillo.
A continuación, superponemos el otro lateral sobre el trozo de tejido al que le hemos hecho el dobladillo, viendo que queda con la forma de nuestro cojín y con las medidas que nos marcamos, es decir, 60x55cm.
Ahora cosemos los dos laterales que quedan abiertos del cojín.
Una vez cosidos podemos rematar los laterales con una tijera de zigzag o con una costura de remate para que no se deshilache.
Como se puede apreciar en la imagen superior, he aprovechado el remate natural de la tela para dejarlo por la parte interna del cojín y no he rematado ese trozo con ningún dobladillo, pero en caso de que no estéis en el mismo caso, deberéis rematar la tela con un dobladillo para que no se deshilache. Como os he dicho en el caso del otro lateral, deberéis hacer el dobladillo hacia fuera, es decir, de la parte del derecho deberéis doblar hacia la parte del revés.
Le damos la vuelta y ya lo tenemos, listo para rellenar. Ya veis que, gracias al margen que le hemos dado a la tela, el cojín no se abre en absoluto. Y no es necesario ponerle cierre alguno.
Sin embargo, si no tenéis tela suficiente como para darle ese margen para hacer el cierre y preferís ponerle algún sujeción al cojín, aquí os muestro dos formas de cerrarlos: Añadirle al filo de la tela una tira de velcro o directamente botones.
Ahora bien, si, como en el caso que os muestro, queréis darle un toque diferente a los cojines o deseáis combinarlos con otros tejidos para que hagan juego con el resto de la estancia, os invito a seguir leyendo ;-)
Una simple tira de un color determinado sobre un cojín neutro puede dar ese toque personal que buscáis.
En este caso, la base ha sido un tejido gris, que es el que da forma al cojín. Pero sobre este he aplicado un trozo de tela de otro color para que combinase con otros elementos de la estancia.
He dado forma al cojín, con la tela gris, enfrentando derecho con derecho. Y dentro, he introducido una tira de la tela que quiero combinar, el ancho aquí, según gustos.
Aquí veis mejor el trozo que he insertado
Lo laterales, los he doblado hacia adentro, en un lado y en el otro.
Los sujetamos con alfileres y cosemos la tira por esos laterales que hemos doblado.
Bien, ya está listo.
Ahora, rematamos con un dobladillo (desde el derecho doblamos el filo hacia la parte del revés de la tela) las partes que montan una sobre la otra y cosemos.
Finalmente, cosemos los dos laterales con normalidad, como hemos visto arriba.
Ya está listo, aquí veis la parte a la que hemos añadido el trozo de tela y la parte del cierre del cojín.
Y ya está listo el cojín también con esta opción combinada.
Espero que os resulte sencillo y útil. No os asustéis por tanta explicación como doy. Es más fácil de lo que parece. Pero he querido detallarlo todo bastante par que no quepa lugar a dudas. De todos modos, si aún así os surgen, aquí estoy para resolvéroslas, no dudéis en comentármelas.
Os mando una sonrisa.
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