La vidriera puede ser de estilo clásico o moderna, pero siempre aporta un toque diferente al espacio en que se aplica. Si tenéis una ventana, puerta de cristal o espejo al que queráis cambiarle el aspecto, ganar intimidad o simplemente embellecer, ahora podéis hacerlo con vuestras propias manos, de una manera muy fácil y con un presupuesto ajustado al bolsillo.
Esto es lo que podréis hacer:
¿Qué, os animáis? Pues no os perdáis el paso a paso.
En mi caso es un espejo, lo que me dificulta aún más hacer este tutorial, porque refleja por todos lados :-( (espero que a pesar de eso lo apreciéis todo bien).
Primeramente limpiamos la superficie en la que vamos a trabajar con un paño humedecido en alcohol.
Elegimos el dibujo y hacemos una plantilla, en mi caso es esta esquina con una especie de flor.
Colocamos papel de calco sobre el espejo y ponemos encima la plantilla y comenzamos a repasarla con un boli, un lápiz u otro objeto.
Una vez lo hemos repasado todo, levantamos la plantilla y el papel de calco y se apreciará levemente nuestro dibujo. Yo le he hecho una foto aunque no sé si apreciaréis las líneas medio marcadas en el espejo, como os digo es una dificultad fotografiar sobre esta superficie.
Por supuesto, en caso de que sea una superficie transparente, tipo puerta o ventana, podréis pegar la plantilla por detrás y calcarla por delante, mucho más fácil :-)
Una vez tenemos la plantilla calcada en nuestra superficie de trabajo comenzamos a rellenarla con tiras de plomo autoadhesivo (se encuentra en tiendas de manualidades y también en muchas ferreterías), conforme lo vamos colocando, vamos presionándolo con un plegador o con la propia uña para que se fije bien. Para cortarlo donde sea necesario podemos emplear tijeras, una cuchilla o una gubia. Y ya está, es cuestión de paciencia ir dando forma y cubriendo todo el dibujo que nos hayamos propuesto.
Una vez tenemos el dibujo cubierto del plomo autoadhesivo, volvemos a limpiarlo con alcohol y ya vamos coloreándolo con los tonos deseados de laca de bombilla. Más que pincelar, puesto que esta pintura es muy líquida, se trata de dejar caer prácticamente las gotitas de pintura porque rápidamente se extiende. Seca bastante rápido, por lo que debéis daros prisa si no queréis que se noten distintas pinceladas o capas.
Y ya está, en fin, no sé que os parecerá, yo creo que queda bastante bien y es una técnica muy fácil para aplicar en nuestra casa y cambiar el estilo de alguna estancia o, incluso, de algún jarrón, ¿por qué no?
Pasad un buen día y no os olvidéis de ser felices hoy.
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