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jueves, 13 de febrero de 2014

Las cerillas del amor

Encender la pasión, reavivar la llama, prender la chispa... el caso es que el amor triunfe, se diga como se diga.
Hoy os propongo unas divertidas galletas con las que triunfar en una velada romántica.


¿Qué os parecen? Sí, sí, son galletas :-) Y la presentación es de lo más natural, no os la perdáis.
Lo primero es elaborar la masa de estas galletas, muy sencillo:


125gr de mantequilla.
125 de azúcar glas.
1 huevo.
325gr de harina tamizada.
1 chorrito de leche si vemos que se nos desmigaja la masa.

Continuamos mezclando los ingredientes.


Comenzamos derritiendo un poco la mantequilla (10 segundos en el microondas serán suficientes), a la que le agregaremos el azúcar glas. Una vez mezclado, añadimos el huevo. Volvemos a mezclar y añadimos en este momento la esencia que queramos, si es que queremos, yo he añadido una pizca de vainilla en polvo.
Por último vamos incorporando la harina.
Hacemos una bola con la masa. La tapamos y la metemos en el frigorífico durante 3 horas.

Transcurrido ese tiempo la sacamos, la estiramos con un rodillo y le damos la forma de nuestra galleta.


En este caso, vamos a cortarla en forma de rectángulo y posteriormente en bastoncitos, simulando las cerillas que queremos realizar. Las colocamos sobre papel antiadherente y las introducimos en el horno ya caliente a 180ºC durante aproximadamente 10 minutos (dependiendo de los hornos).

Vamos ahora a hacer la glasa real. 


Separamos la clara de la yema de un huevo. Montamos las claras a punto de nieve y, para hacer la glasa real yo mezclo 3 cucharadas de azúcar glas por 1 de merengue. Sé que son unas medidas un poco raras pero a mi me funciona muy bien. En esta ocasión he querido ponerle algo de colorante alimenticio en polvo. He usado color rojo y mucha menos cantidad de la que he fotografiado, que ya de por sí era poca, porque nada más sacudir la cuchara me he dado cuenta de que ya había teñido suficientemente (cunde muchísimo).
Mezclamos bien y comenzamos a mojar la punta de nuestras galletas para simular la cabeza de fósforo de nuestras cerillas.

¿Recordáis la caja de cerillas que forramos ayer? Pues, recuperadla porque hoy también la vamos a usar, ya os dije que la presentación sería de lo más natural y, ¿qué hay más natural para unas cerillas que una caja de cerillas?


El mensaje inicial y el título de este post era romántico. Después de tanta galleta concluimos con una caja de cerillas comestibles para encender la chispa del amor.



El mensaje corre de vuestra cuenta ;-) 





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