Las vacaciones estivales van acabando y toca la vuelta a la rutina, especialmente para las familias con peques de por medio. Vuelta al cole, revisión del estado de la ropa, compra o arreglo del babero, materiales escolares, libros...
La verdad es que cuando era pequeña, la vuelta al cole me llenaba la barriga de mariposas, ilusionada y a la vez nerviosa por lo que el nuevo curso escolar me depararía. Pero me encantaban los preparativos. El olor a libro nuevo, la tarde forrándolos, la preparación de todos los materiales que nos pedían...lápiz, goma, estuche, una libreta para apuntar los deberes para casa...