Lo de fácil se queda corto, es facilísima, la tienes lista en menos de 15 minutos, sin contar el tiempo de refrigeración.
Si le tenéis miedo este tipo de elaboraciones, aquí está la solución, porque ni requiere montar claras ni complicaciones de otro tipo y, aunque obviamente en esencia podríamos decir que no es una mousse, sí que lo es en textura.
Es un postre delicioso para tomar fresquito en verano. Además, como se emplean muy pocos ingredientes que siempre podemos tener en casa, es un recurso estupendo para salir de un apuro.
Estos son los ingredientes que necesitarás para 4 personas:
1 lata pequeña de melocotón
1/2 tarrina de queso de untar
1 sobre de gelatina neutra (en mi caso es de limón, que también le sienta bien)
1 cucharada sopera de azúcar (moreno o no, eso dependerá de si ha tomado el sol ;-))
¡Y ya está!
Qué, ¿nos ponemos manos a la obra?
Paso 1: con la batidora tritura los melocotones escurridos. Incorpórales el queso de untar y vuelve a triturar.
Paso 2: elabora la gelatina según las instrucciones del fabricante (yo le he añadido el almíbar de los melocotones y se lo he restado del agua indicada para la gelatina).
Paso 3: Todavía caliente la gelatina, la incorporamos al batido anterior, añadimos el azúcar al gusto (tened cuidado si habéis empleado ya el almíbar pues puede quedaros demasiado dulce) y volvemos a batir.
Paso 4: Vertemos en un molde y dejamos enfriar un poco a temperatura ambiente y posteriormente en el frigorífico durante 1 ó 2 horas.
Paso 5: Decoramos al gusto y... ¡a comer!
Buen provecho.
No hay comentarios :
Publicar un comentario
Gracias por participar en Febrero es así, tus comentarios son bienvenidos ;-)